Historia de un retrete...

¿Sabes que Dios puede utilizar burros para enunciar su palabra (ver la historia de Balaam de Beor, si tienes dudas) y puede causar que incluso unos retretes sean fuentes de provisión para aquellos a quienes Él ama?

Cuando regresamos de Shangai hace un mes, tuvimos una demora de 12 horas de vuelo y muchas complicaciones en el aeropuerto de Shangai por causa de un WC atascado en el avión de Air France. No voy a entrar en los detalles sobre qué podía haber causado la avería... pero resulta que a 60 de los pasajeros, incluyendo un servidor y su familia, les fue denegado el embarque. No fue tan malo, en realidad: comimos gratis, pasamos unas horas en un hotel de lujo, e incluso, nos cambiaron el billete a “business class” en nuestro eventual vuelo de vuelta.

Pero tenemos un hijo cuyo sueño es llevar un programa de radio titulado “¡Yo podría denunciarte!” Al leer la letra pequeña de los derechos del pasajero, encontramos que Air France tenía la obligación de pagar una indemnización de unos €600 por billete en casos así. Aún sabiendo que seguramente encontrarían una manera de escapar su deber, hicimos todo el papeleo y, para nuestra grata sorpresa... ¡han pagado! Hace unos días, recibimos un cheque por €3600 que resultó en una serie de gritos y asombro general. Lo interesante es que, en estos momentos, toda la familia está buscando cómo Dios va a pagar por los gastos de King’s Kids (programa de campañas este verano que nos llevará a Nepal, Valencia y Berlin. ¿Quieres venir?). Parte de la provisión, como veis, ha llegado ya.

“El SEÑOR no está limitado a salvar con muchos o con pocos.” Puede utilizar cualquier cosa, ¡incluso al “Sr. Roca” para proveer para sus hijos! ¡Ánimo, chavales!

Diversión u obligación....

¿Cuál es tu criterio, diversión u obligación, para seleccionar los proyectos en las cuales inviertes tu tiempo y energía?

Hace tiempo comenté a un colega sobre algún proyecto venidero que “debería ser divertido”. Inmediatamente me paró. “¿Por qué hablas sobre diversión en el ministerio? ¿Dónde está el sacrificio, la disciplina y el trabajo duro?” espetó con bastante disgusto sobre mi elección de adjetivos. En verdad estos elementos siempre están presentes en cualquier tarea de importancia; pero para mí, si no empiezo con la esperanza de que haya nuevos retos, territorios sin descubrir en mi experiencia y - sí, diversión - no quiero alistarme. Yo sirvo a un Dios bastante creativo. He aprendido que si alguna responsabilidad llega a ser aburrida o me siento esclavizado a ella significa que o bien hay alguna deficiencia seria en mi actitud, o bien estoy fuera de mi llamamiento y es tiempo de mirar a otros campos en la viña de mi Maestro.

Acabamos de realizar otra campaña de King’s Kids. Era algo como nuestra trigésimo-cuarta campaña en 14 años. De verdad, toda nuestra familia estábamos fritos después de volver de China con tres días de antelación. Yo todavía llevaba una gripe (¡no aviar!) desde nuestra estancia en Asia. Hubiera sido mas aconsejable quedarme en casa pero todavía no hay nada más divertido que ver a algunos jóvenes abriendo sus vidas al “King” y presenciar el efecto cuando lo llevan a la calle. Vimos niños llorando en tiempos de alabanza y vecinos que anteriormente escribieron denuncias a la policía en contra de nuestro local, ahora cocinando para los chavales y preguntando sobre cómo pueden conocer a Dios más personalmente. En una de nuestras actuaciones en frente de la catedral, una “tuna” de Portugal se pararon a mirar. El gozo de nuestro grupo fue tan impactante que varios de los músicos universitarios, vestidos en sendos trajes y capas negras, no podían resistir tumbarse en el suelo y hacer la “cucaracha” con nosotros. “Divertido” es un adjetivo bien adecuado.